Por fin es sábado...otra semana de cambiar de ciudad, de mil revoluciones por segundo, de altos y bajos, esa maldita montaña rusa que te hace estar en lo más alto y horas después preguntarte de qué cojones va todo esto...
Hoy me he despertado cansada y jodida por no poder dormir más de 6 horas seguidas en esta ciudad, pero en cuanto me he lavado cara y dientes, me han inundado pensamientos súper positivos...esos pequeños rayos de sol que se cuelan por las rendijas de mi cerrada mente de este último año. Veo que últimamente tengo más rendijas...hasta estoy cogiendo colorcico mentalmente! :)
Me doy cuenta de que, tal y como soy yo, el dejar algo por lo que me dejé la piel sin acabar puede atormentarme en mi vida posterior. Y sabéis qué? Que si pienso eso es porque estoy mucho mejor y empiezo a poder ver las cosas con perspectiva, como desde el palco de arriba, que quieras que no, te sientas y ves toda la situación de abajo de puta madre.
Sentimientos más duros, menos temporales, sentimientos definitivos...es decir, el final de una horripilante historia...
Algunas pelis buenas acaban mal, pero cuando se trata de tu vida...cómo quieres que acabe tu experiencia vital? Estamos locos? Quieres que acabe de puta madre. Yo quiero un final feliz.
Yo no quiero aprender ya más. Se aprende sufriendo, te vuelves más sabio a golpe de lágrima, de sollozo ahogado, de dolor en el pecho, de escalofríos mortales en pleno mes de julio a 40 grados. No señor, no quiero aprender más que lo justo y necesario.
Sólo quiero hacer caso a mi corazón y no lastimarlo, al contrario, mimarlo y darle todos los caprichos posibles, convertirlo en un niño de mamá!! Y cómo se hace ésto? Pues haciéndole caso y no obligándole a ser ese niño que no puede jugar porque no le dejan...Nunca podría vivir así, con represión emocional, con rencores, con silencio administrativo obligado, con úlceras sentimentales. No, perdona, es que yo no vine a este mundo para vivir una vida de mierrrrrda, yo estoy aquí para vivir una vida real y plena. Y tú que lees esto, también, coño!
MIL GRACIAS POR VISITAR EL BLOG CADA DÍA, OS QUIERO CABRONES!
Un besico.
Carita de Mona
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