La verdad es que el otoño murciano me ha decepcionado. Hace frío, mucho. Quizá sea que tengo frío metido dentro...frío emocional...porque quizá esté rodeada de demasiada frialdad, quizá. Yo sólo sé que veo los copos de nieve caer, voy poco abrigada (como siempre), entonces me paro cansada y miro al cielo desesperada buscando un rayo de sol que me quite este helor...y todo eso ocurre por dentro de mi corazón, mientras noto que la tristeza se está apoderando de mi y con razón. Esto no puede estar pasando...pero está pasando, y me siento indefensa y congelada...porque todo es frío aquí. Y en estos momentos el valor de un abrazo es incalculable.
Y pensando, pensando, pensando, pensando...sobre todo cuando todo el mundo duerme, cuando escucho los ronquidos de mis vecinos, la tele a toda hostia de mi madre, y ella durmiendo plácidamente. Mientras toda esa quietud reina a mi alrededor, decenas de trazados recorren mi mente, dibujando distintos itinerarios, surcando recuerdos, surcando el futuro que no existe aún, cruzando puentes casi destruidos para llegar a rincones casi olvidados de la mente, y desde esa perspectiva volver a trazar el camino de vuelta, con la información tramposa del futuro. Pero eso no sirve de nada, sólo sirve para que mis ojeras sean más grandes cada día, y mis ojos así no se pueden abrir bien para ver todo lo bueno que me rodea (que algo habrá!...y lo hay, of course).
Y así no va la cosa. Lo que hay que hacer por la noche es dormir. Ni siquiera tener sexo, eso se hace a cualquier hora menos cuando hay que dormir. Puede retrasar la hora de dormir, correcto, pero nunca ocuparla. Dormir es sagrado y mágico, y punto en boca jajaja!!
Lo malo de llegar a la fase en que aceptas tu destino y decides echarle ovarios al asunto, es eso mismo, tu puto destino de mierda. Una cosa es tener claro lo que hay, y otra muy diferente estar dispuesto a soportarlo...o ser capaz de soportarlo sin ir muriendo. En fin, que sí, que seguiré durmiendo poco o nada y sonreiré 3 veces mal contás cada día, ahá, seguiré sintiéndome incómoda a cada instante, los días serán como pequeñas piedras afiladas en un camino por el que andas descalzo a 40º a la sombra, ahá...como somos inmortales todos y tenemos vida infinita, pues podemos perder el puto tiempo en ser infelices...ahá...me queda claro...
NO!
Esta canción es lo que escucho estos días en bucle. Bueno, desde que la conocí allá por mi cumpleaños hace un par de meses, la escucho cada día varias veces. Pero ahora se ha convertido en un himno que cada mañana canto en el coche as if there was no tomorrow. Es un temarraco, de las mejores canciones de este 2014 para mi. This is the second to last chance...además de verdad.
Instead of crying I show my smile,
makes me feel ashamed.
Beneath the stars there’s a shame of what we are.
I wonder why there’s no end to those lies.
Os dejo con los recuerdos de un día feliz no, lo siguiente...y pensar que hace 2 semanas estaba allí...
"Yo me llamo Guadalupe" (mi frase típica en todos los mexicanos jaja) ...y como buena Guadalupe amo el picante!
Walker Art Gallery
Albert Dock
Albert Dock
Con Marilyn en el Abert Dock, tomando el sol.
Beatles hechos con Jelly Beans.
En la Inglaterra profunda, de repente. Me enamoré de este graffiti que dice que al final todo irá bien, y si no va bien es que no es final :)
Catedral anglicana. Muy bonita.
La calle que va a juego con mi muñeca, y con mi filosofía de vida (sí, guapa, pues aplícatela jajaja)
Maletas en Hope Street...pena el andamio.
Sintiéndome gigante en Hope Street :)
No, no entré, R, pero vi la carta y tal...(qué desastre jajaja)
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